La semana pasada, la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados rechazó el proyecto de ley que propone un “autopréstamo” desde los fondos de AFP. Pese a esto, la iniciativa pasará a la sala de la cámara con informe negativo y será evaluada por todos los parlamentarios.
La norma que fue rechazada por ocho votos en contra, dos a favor, y dos abstenciones, contiene tres proyectos distintos que proponen la figura del «autopréstamo» pero con distintas fórmulas.
Uno propone el retiro de hasta el 15% de los fondos y los otros dos hasta el 100%, pero todos establecen métodos para devolver el dinero.
¿En qué consiste el Autopréstamo AFP?
Según establece el artículo 85° del proyecto de ley, las personas afiliadas a este “Sistema Mixto”, que no estén pensionadas, y que se encuentren a cinco años o más del cumplimiento de la edad legal de jubilación. Tendrán derecho a realizar retiros “en carácter de préstamos con cargo al saldo mantenido en sus cuentas de capitalización individual de cotizaciones obligatorias”.
Se considera un “autopréstamo”, porque la misma persona deberá reponer esos recursos, en UF, sin que apliquen intereses.
Autopréstamo de hasta el 15%
La fórmula que fue presentada por diputados del PDG propone el retiro de hasta el 15% de los fondos de pensiones, con la obligación de devolver el dinero, sin intereses, en 60 cuotas o en hasta cinco años.
El monto solicitado se convertirá a la Unidad de Fomento del día de la entrega del dinero y deberá ser devuelto a la cuenta individual del solicitante reajustando conforme a las variaciones experimentadas por la Unidad de Fomento, aunque sin intereses.
Quienes tengan entre $1 millón y $10 millones ahorrados, podrán solicitar hasta un millón de pesos. Si es menos, podrán pedir el monto total.
Este autopréstamo se podrá solicitar las veces que sea necesario, siempre y cuando no tenga un retiro pendiente. Es decir, si no ha reintegrado el dinero que solicitó una vez, no podrá hacer otro.
Autopréstamo del 100% con prorrateo
La principal diferencia de esta propuesta que fue presentada por los diputados Pamela Giles (Partido Humanista) y René Alinco (PPD) en proyectos distintos, es la cantidad de dinero que se puede solicitar y que el reintegro del dinero se haría junto con la cotización mensual de los trabajadores y hasta el día que la persona jubile.
Acá se podría solicitar hasta el 100% de los fondos acumulados bajo, la condición de reintegrarlos en cuota prorrateadas que deberán comenzar a pagarse en el plazo máximo de cinco años desde efectuado el giro y hasta el último mes de cotización antes de jubilar.
Es decir, el dinero se reintegrará con la cotización obligatoria de las AFPs, divididas en la cantidad de cotizaciones restantes a la fecha de jubilación legal del afiliado. De todos modos, esta deuda podría ser pagada de forma anticipada si el trabajador así quiere.
Los cotizantes, además, podrán solicitar giros de sus fondos sin límite de veces, siempre que no tengan un giro pendiente de reintegro.
Las críticas al proyecto
Desde el gobierno, el propio ministro de Hacienda, Mario Marcel, calificó el proyecto de un “autoengaño” y, además, la medida que sirve de “alivio temporal” finalmente repercute como “costo para todos”.
“En general, yo creo que la ciudadanía entiende esto, entiende que algo que puede ser un alivio temporal, a la larga se transforma en un costo para todos y especialmente, para aquellos que viven de un sueldo, que tienen menores ingresos, que no tienen forma de defenderse de la inflación”, señaló el encargado de las arcas fiscales.
Asimismo, señaló “Es cierto que a veces puede parecer un balde de agua fría frente a expectativas, ansiedad, pero yo creo que es parte de la responsabilidad de la autoridad pública advertir estos riegos y no dejarse arrastrar por las ganas de generar un alivio transitorio”, agregó el secretario de Estado.
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